LA DANZA

Una tradición enormemente arraigada entre los vecinos de Villalobar es la danza que acompaña la procesión en honor a Santo Toribio, que se celebra el 16 de abril, y que también tiene lugar cada 25 de agosto en honor a San Peregrino.

En ella participan 8 danzadores dirigidos por el cachiburrio, que protagonizan diferentes secuencias, como el baile de la Virgen, las cuatro calles, el árbol o los oficios, al son de una entrañable melodía de gaita.

En la actualidad las nuevas generaciones van tomando el relevo para participar como danzadores, ya que desde hace años, ha sido tradición perpetuar esta danza de padres a hijos. No debemos olvidar a los cachiburrios que han sido el alma mater de esta tradición, como Miguel Arriola, Bautista Rioja, Bautista Robledo, José Félix García, Diego Robledo o Nacho Pinedo.

En 1969, los danzadores participaron en un concurso de danzas riojanas que se celebró en el Teatro Bretón de Logroño, en el que quedaron en segundo puesto, después de los danzadores de Anguiano. Posteriormente participaron en otro certamen, que esta vez tubo lugar en Santo Domingo de la Calzada. De ambos eventos se conservan testimonios fotográficos.